Introducción.
La madrugada del sábado al domingo, a las 2 de la mañana y retransmitido por Peacock, se disputará el duelo que medirá a Los Ángeles Chargers contra Buffalo Bills. A comienzos de la temporada, se esperaba que el SoFi Stadium fuera el escenario de un enfrentamiento entre dos de los equipos más potentes de la Conferencia Americana. El partido está totalmente descafeinado, puesto que estos Chargers han naufragado esta campaña y su proyecto deportivo parece a la deriva, mientras que Buffalo Bills arriba a la Costa del Pacífico en el mejor momento del año. El duelo entre Josh Allen y Justin Herbert tendrá que esperar, debido a la lesión de este último.
Los Ángeles Chargers llega a este envite después de sufrir una humillante derrota (21-63), en el Allegiant Stadium, frente a Las Vegas Raiders. Brandon Staley ya es historia como head coach del equipo, siendo ascendido, como entrenador interino, Giff Smith, que, desde 2016, está en la franquicia y era el encargado de los outside linebackers. A pesar de lo que pudiera parecer, Chargers aún no está matemáticamente eliminado de la carrera por los Playoffs, aunque sus esperanzas se reducen a menos de un 1%.
Por su parte, Buffalo Bills afronta la tercera de sus finales, tras doblegar a Kansas City Chiefs y Dallas Cowboys. El equipo del oeste de New York ha llegado a su mejor nivel futbolístico en el momento más álgido de la temporada. Tras todas las vicisitudes sufridas -a nivel de lesiones y cuestiones extradeportivas-, Buffalo está en disposición de lograr su pase a postemporada, aunque aún depende de resultados rivales. Las huestes comandadas por Sean McDermott desean regresar de California con una victoria, para afrontar con esperanza los dos últimos partidos de la temporada regular ante rivales divisionales: New England Patriots y Miami Dolphins.
Giff Smith, nuevo HC interino de Chargers – latimes.com
Análisis de la ofensiva.
Joe Brady parece haber cogido la medida del ataque de Buffalo Bills. Tras la exhibición terrestre ante Dallas Cowboys, parece que esta ofensiva ha adquirido una gran confianza y parece no tener techo. Brady y su staff -recordemos las grandes aportaciones del D.J. Mangas y Mike Shula- han revitalizado esta ofensiva, dando un papel protagonista a James Cook, implicándolo en el juego aéreo. Además, se han sacado de la chistera a Ty Johnson (una de las sensaciones de los últimos partidos), han implementado nuestro juego terrestre, alternando carreras por el exterior y el interior, han comenzado a darle mucha importancia a los pases en la zona flat y, en definitiva, han conseguido que el ataque no necesite a un Diosh Allen en cada snap.
Sin duda, la gran noticia que dejó el duelo ante Cowboys -aparte de la eclosión magistral de Cook- fue la constatación de que la línea ofensiva está a un nivel bárbaro. Bien se ha dicho que los campeonatos se ganan en las trincheras y esta offensive line está a la altura de las mejores unidades de la liga. Es muy importante que la línea no ha sufrido apenas lesiones y esa química se está palpando en los últimos envites. Además, la unidad está contribuyendo, de manera brillante, tanto a la protección de Josh Allen como al desempeño terrestre del ataque. Mitch Morse sigue a su gran nivel, Dion Dawkins y Spencer Brown parecen poder lidiar con los mejores edge rushers de la liga, mientras que O’Cyrus Torrence y Connor McGovern rayan a gran altura por el interior.
Josh Allen tendrá enfrente a una defensiva, que tiene grandísimas individualidades, pero que, como conjunto, no ha funcionado durante toda la temporada. No obstante, los jugadores de Chargers querrán reivindicarse en este partido y este enfrentamiento tiene más veneno del que pueda parecer. Por tanto, la receta para el triunfo parece clara: asentar el juego terrestre, aprovechando el gran momento de forma de James Cook, consolidar los drives con pases en el primer y segundo nivel, y tratar de ser efectivos en zona roja. Josh tendrá que descifrar la 3-4 de Giff Smith, dar alimento al primer nivel (Stefon Diggs, James Cook, Dalton Kincaid, Khalil Shakir, Dawson Knox) y romper en scramble cuando la ocasión lo requiera. Teniendo en cuenta lo poblada que va a estar, a priori, la zona underneath y la peligrosidad de Derwin James y Asante Samuel, puede ser un partido para usar indiscriminadamente los pases a la zona flat y las carreras por el exterior.
Por otro lado, Cook deberá seguir siendo gran protagonista de este ataque, aprovechando su estado de forma, su inteligencia a la hora de percutir por el interior y el exterior, así como su capacidad por aire. Ty Johnson es seria duda para el partido, mientras que Latavius Murray deberá seguir siendo dominante en corto yardaje.
La defensa de Cowboys no pudo frenar a James Cook – ctpost.com
Análisis de la defensiva.
La defensa mostró una intensidad, propia de Playoffs, ante Dallas Cowboys. Sean McDermott consiguió que sus mesnadas defensivas hicieran, sin duda, la mayor exhibición de la temporada, anulando por completo a uno de los ataques más sólidos y variados de la competición.
La presión al quarterback rival está siendo la primera cuestión sobre la que se está asentando el dominio de nuestra defensiva. Leonard Floyd se erige en el adalid de esta unidad, bien secundado por Ed Oliver, por el interior, y Greg Rousseau, por el exterior. A.J. Epenesa es duda para este duelo, mientras que Von Miller parece estar recuperando, poco a poco, su forma.
Terrel Bernard sigue en un estado de forma sensacional, erigiéndose en el comandante en jefe de toda la defensa. Su capacidad para leer los ataques rivales, cambiar y ajustar las posiciones de sus compañeros lo convierten en uno de los mejores defensores de toda la liga. Tyrel Dodson está creciendo mucho al lado de Bernard, convirtiéndose en una amenaza al blitz y en un baluarte a la hora de frenar la carrera rival. Por su parte, Taron Johnson, a pesar de alguna laguna a lo largo de la temporada, también está siendo muy efectivo, tanto en juego aéreo como terrestre.
Rasul Douglas llegó para cambiar la defensa de Buffalo Bills y, sin duda, esta misión la está consiguiendo. El otro día secó a CeeDee Lamb, uno de los mejores receptores de la competición, y es capaz de ser ese jugador que puede cambiar el signo de un partido. Christian Benford también está a un gran nivel. La lesión de Micah Hyde significó la titularidad de Taylor Rapp, que aportó frescura, músculo e intensidad a la defensiva, alternándose en la posición con Jordan Poyer. Hyde está descartado para este envite, así que seguiremos disfrutando de la pareja Rapp-Poyer.
Es una incógnita la versión que nos encontraremos de la ofensiva de LA Chargers, debido al clima de inestabilidad que vive la franquicia. Lo único claro es que sus jugadores y su staff técnico querrán dejar atrás la paupérrima imagen mostrada frente a Raiders. Keenan Allen es baja para el partido, pero tanto Easton Stick como Austin Ekeler, Quentin Johnston o Gerald Everett querrán reivindicarse.
Christian Benford fue uno de los grandes baluartes defensivos ante Cowboys – buffalonews.com
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