Introducción.
Esta noche, la as 22:25 horas (horario peninsular), disfrutaremos de un duelo divisional, en el High Mark Stadium de la localidad neoyorquina de Orchard Park, que medirá a New England Patriots frente a Buffalo Bills.
El partido se prevé uno de los divisionales más desequilibrados de la última década, merced a la desigual trayectoria de ambas franquicias. New England Patriots, en el primer año de la era post-Belichick, viene de una racha de cuatro derrotas consecutivas, habiendo solo ganado 3 partidos. No obstante, la llegada del quarterback Drake Maye abre un horizonte de expectativas, para que el conjunto de Massachussetts sea competitivo más pronto que tarde. Es increíble lo que está haciendo el egresado de la Universidad de North Carolina, teniendo en cuenta lo mal que está rodeado y las controvertidas decisiones que le llegan desde la banda.
Por su parte, Buffalo Bills necesita la victoria para casi dejar sellado el importante seed 2, que supondría un hipotético divisional en casa, tras la derrota de Pittsburgh Steelers. El ansiado seed 1 queda ya como un imposible, puesto que Kansas City Chiefs logró el triunfo sobre Houston Texans y tendría que perder los dos partidos restantes (Steelers y Broncos), junto con tres triunfos de Buffalo Bills. Bills arriba a este encuentro divisional tras el gran partido realizado en Detroit y quiere sumar el duodécimo triunfo de la temporada, esta vez ante New England Patriots.
Análisis de la ofensiva.
Joe Brady dio una master class ante Detroit Lions. Sin duda, fue su mejor partido, desde que es coordinador ofensivo de Buffalo Bills. Advirtió perfectamente la debilidad de la zaga de Aaron Glenn, los linebackers, y sacó el máximo partido a este mismatch, involucrando a los running backs era el juego aéreo. Ty Johnson merece una mención aparte. Además, el juego terrestre fue muy variado, con acarreos de James Cook y Ray Davis. Y, por fin, logró que se estableciera una magnífica sinergia entre Josh Allen y Dalton Kincaid.
Josh Allen, sin duda, dio una exhibición, realizando una de sus mejores actuaciones de la temporada, precisamente, frente al, hasta entonces, mejor equipo de la NFL. Es alucinante el crecimiento de Joshua Patrick en escenarios donde se requiere de su mejor versión.
Frente a New England Patriots, veremos qué planteamiento pone sobre el emparrillado Joe Brady. Mal haríamos en menospreciar una defensiva como la de Patriots que, aunque no está en su mejor momento, siempre se caracteriza por su oficio y peligrosidad.
La línea ofensiva ha de seguir en el excelso nivel que está dando hasta el momento, otogándole esos segundos extra a Josh en protección de pase y abriendo avenidas para que Cook, Johnson y Davis martiricen a las defensivas. En principio, el duelo de trincheras será muy favorable para la guardia pretoriana de Josh Allen, pero no debemos relajarnos con jugadores veteranos como Davon Godchaux, Anfernee Jenning o Yannick Ngakoue.
Josh no debe bajar el listón, ya que esta secundaria es capaz de anticiparse bien y tiene buenos efectivos en las figuras de Christian González, Jonathan Jones, Kyle Dugger o Jabrill Peppers. Teniendo en cuenta la hipotética debilidad a la espalda de sus linebackers y el hecho de que el nickel, Marcus Jones, no será de la partida, es un encuentro para que Josh tiranice este primer nivel de pase, acumulando targets para Dalton Kincaid, Khalil Shakir y Curtis Samuel. Cuando Josh lo vea claro, puede romper el partido en scramble, aprovechando su capacidad de carrera fuera del pocket.
En profundo, Josh no debe precipitarse, a pesar del buen momento de Mack Hollins y el regreso de Keon Coleman, ya que esta secundaria puede darnos más de un susto.
En principio, a la hora del partido, se espera una temperatura de -10 grados, con rachas de viento de 15 kilómetros por hora. Esto no será un problema para el juego aéreo, aunque considero que va a ser un encuentro en el que se corra mucho. No obstante, el emparrillado estará muy duro y habrá que tratar de evitar cualquier tipo de lesión, que sería la peor noticia.
Análisis de la defensiva.
Tras el desastre ante LA Rams, la defensiva de Bobby Babich mostró luces y sombras ante la colosal ofensiva de Detroit Lions. Las luces vinieron de un planteamiento bestial, generando mucha presión y no dejando que Jared Goff entrara en ritmo, en los dos primeros drives de los de la MoTown, No obstante, tras el ajuste de Ben Johnson, Bobby Babich no tuvo respuestas y la defensa se vio, en cierto sentido, totalmente desbordada, acumulando yardas y puntos. Salvo el fumble generado por Christian Benford, la defensa se vio muy superada por Detroit Lions.
No obstante, hubo ciertos aspectos que mueven a la esperanza. Especialmente, hay que poner de manifiesto el partido de Ed Oliver, que rozó la excelencia. Mucho se ha hablado desde estas líneas del pésimo desempeño del interior de nuestra línea defensiva, pero Oliver realizó un auténtico partidazo, bien secundado por Austin Johnson, DaQuan Jones y DeWayne Carter. En un hipotético duelo desequilibrado, nuestras trincheras lograron vencer a la mejor línea ofensiva de la nación.
Ahora bien, habrá que ver si estos 44 y 42 puntos recibidos ante Rams y Lions son algo coyuntural o se erigen, más bien, en un problema estructural. Medirse a dos de las mejores ofensivas de la NFL supone recibir puntos, pero la sensación, por instantes, de no poder parar a estos ataques es lo más preocupante. La ofensiva de Patriots será un buen test para que nuestra defensiva coja confianza, conceda pocos puntos y gane en sensaciones de cara a los inminentes Playoffs.
Será la primera vez que Drake Maye visite Orchard Park, y al rookie hay que recibirle como se merece. Necesitamos que Rousseau, Epenesa, Von Miller y Smoot hagan zozobrar a Maye y forzarlo a cometer el fallo. Oliver debe confirmar la exhibición realizada ante Lions, mientras que Carter, Jones y Johnson han de seguir subiendo el nivel en las trincheras.
Matt Milano no realizó un buen partido ante Lions y tiene que seguir recuperando sensaciones y coger ritmo de competición. Ante Detroit, se retiró con molestias y es cuestionable para este envite. Terrel Bernard tampoco está en el mejor momento de la temporada y no se le está viendo en una gran sintonía con Milano. No está claro quién será la pareja de baile de Bernard, ya que tanto Milano como Dorian Williams y Baylon Spector son duda. Así que, quizá, veamos a Joe Andreessen. Rhamondre Stevenson y Antonio Gibson constituyen una productiva pareja de running backs y no hemos de menospreciarlos. Además, habrá que tener mucho cuidado con la movilidad de DeMario Douglas y Hunter Henry, en ese primer nivel.
En la secundaria, el desempeño de Cam Lewis y Cole Bishop, como sustitutos de Taylor Rapp y Damar Hamlin, fue muy bueno, a pesar de fallos puntuales. Tanto Rapp como Hamlin siguen siendo duda, así que podríamos seguir viendo a Bishop y Lewis en los puestos de strong y free safety, lo que sería bueno de cara a Playoffs. Kaiir Elam realizó un muy buen partido, sustituyendo a Rasul Douglas, y Christian Benford ya puede ser considerado como uno de los mejores cornerbacks de la liga. Además, Taron Johnson volvió al excelente nivel que nos tiene acostumbrados. En profundo, hay que tener cuidado con Kendrick Bourne, Kayshon Boutte, Ja’Lynn Polk o Javon Baker que, sin duda, querrán atraer focos en un marco como el Highmark Stadium.