El ojo del bisonte. Week 9: Miami Dolphins @ Buffalo Bills.

Introducción. Esta tarde, a las 19 horas (horario peninsular), asistiremos, en el Highmark Stadium de la localidad de Orchard Park (New York), a un duelo divisional que medirá a dos conjuntos que llegan con trayectorias antitéticas: Miami Dolphins y Buffalo Bills. A priori, se prevé como uno de los encuentros más desequilibrados de los últimos años, con una Miami que llega en una auténtica crisis de resultados y plagada de jugadores lesionados. No obstante, en un duelo divisional, todo puede pasar, más si cabe cuando si Buffalo Bills obtiene el triunfo, puede casi sentenciar -un año más- la AFC Este. Las huestes aleccionadas por el díscolo Mike McDaniel ostentan un récord de 2 victorias y 5 derrotas. Vienen de una racha de dos partidos perdidos de manera consecutiva (Cardinals y Colts) y en medio de muchas dudas sobre el futuro del proyecto. Tua Tagovailoa, quarterback de Miami, regresó la pasada jornada ante Arizona y, sin duda, tendrá muchas ganas de reivindicarse ante el eterno rival -en los últimos años de Dolphins-, un equipo frente al que sufrió su última conmoción cerebral, en la pasada Week 2. Por su parte, Buffalo Bills llega a este duelo divisional, tras realizar el mejor partido de la temporada, en la Ciudad Esmeralda frente a Seattle Seahawks. La Bills Mafia, ávida de un buen juego y resultados, deseaba que su equipo hiciera un encuentro redondo, y las mesnadas lideradas por Sean McDermott ofrecieron una exhibición a ambos lados del ovoide. La defensa salió muy enchufada, teniendo un gran desempeño en los cuatro cuartos. Brady supo equilibrar la ofensiva, trazó un plan perfecto, que Josh Allen -con algún lapsus y la Diosa Fortuna de su parte- supo llevar a cabo. Por fin, vimos un partido excelente de principio a fin. Este partido puede ser más trampa de lo que el aficionado medio de Buffalo cree, ya que un triunfo de Buffalo supondría casi sentenciar la división… en la Week 9. Lógicamente, para Miami, es la última oportunidad de engancharse a la lucha por la AFC Este. Análisis de la ofensiva. Ha costado 8 jornadas, pero, finalmente, Brady encontró la fórmula para hacer que este ataque funcione, más allá de actuaciones individuales, sino de forma coral. La llegada de Amari Cooper, actuando como claro receptor uno, puede estar detrás de esta evolución de la ofensiva. No obstante, ante Seattle Seahawks, el egresado de la Universidad de Alabama apenas pisó el emparrillado y, sin duda, no fue la clave del buen hacer de la ofensiva, desmintiendo muchos de los artículos escritos por sesudos analistas durante la última semana. Ante Seattle, funcionó el equipo en su conjunto, creciendo desde la conexión -cada vez más patente- entre Josh Allen y Keon Coleman. Pero es que, paradójicamente, cuando Allen buscó a Shakir o Kincaid… el ataque funcionó. Y todo presidido por un James Cook que tenía muchas ganas de reivindicarse, tras perderse el partido ante Titans y la exhibición realizada por el rookie Ray Davis. Ese fue el verdadero axioma que hizo carburar este ataque. Ante Miami Dolphins, la receta debe seguir siendo la misma: Josh Allen debe disfrutar y seguir involucrando en el juego a todos sus efectivos. Se ve a un Josh alegre, templado, sin nervios, sabiendo lo que hace snap tras snap… y sabiéndolo ejecutar. Si Josh se divierte, el ataque de Buffalo Bills es casi imparable. La receta del éxito ofensivo ha llegado con el involucramiento de todos sus efectivos. En primer lugar, Josh tiene que seguir repartiendo el ovoide, dando de comer a todos sus efectivos. Nos congratulamos de que se viera, por fin, a Dawson Knox, que Dalton Kincaid fuera encontrado en la zona roja y fuera importante en fases del encuentro. Khalil Shakir debe seguir siendo el faro de este ataque, la válvula de escape de Josh. Amari Cooper puede tener un gran desempeño ante Dolphins y estar más involucrado en esta ofensiva. Además, puede ser un encuentro en el que la conexión entre Josh y Keon pase ya al siguiente nivel, del flirteo y las caricias iniciales a la cena, “postre” y desayuno, tras una noche de pasión. La línea ofensiva está jugando bien, pero debe tratar de cometer menos penalizaciones. Y esto se consigue siendo más disciplinados y estando más atentos a cada instante del juego. Aaron Kromer está realizando una labor encomiable, pero esos errores individuales que, hasta el momento estamos sorteando, pueden costarnos muy caros a partir de esta fase de la temporada. El juego terrestre vive días de vino y rosas al oeste del gran estado de Nueva York. James Cook supo reivindicarse, tras la gran actuación de Ray Davis ante Titans. Teniendo en cuenta las numerosas bajas de la defensiva de Miami, el juego de carrera debe asentarse, ha de percutir y horadar la zaga dolphin. Desde ahí, Josh debe ir asegurando el ovoide, moviendo las cadenas y machando a la defensa. Además, la kriptonita de esta defensiva ya sabemos que siempre han sido las carreras en scramble del propio Allen. Puede ser un partido muy feo, en el que cueste hacer puntos, siempre y cuando demos por batido a un rival que llega muy débil. Por tanto, el ataque debe dar un golpe sobre el emparrillado del Highmark Stadium, desde el primer drive. Si Buffalo sale con los ojos inyectados en sangre y consigue producir y ser efectivo, Miami se puede caer y disolver como un azucarillo. Es el partido más importante de la temporada y la ofensiva de Bills ha de ser consciente de ello. Análisis de la defensiva. Bobby Babich nos deslumbró con un sistema defensivo que, prácticamente, anuló a una de las ofensivas más en forma de la liga. La zaga de Buffalo consiguió minimizar un ataque terrestre temible, en el que Kenneth Walker III y Zach Charbonnet estaban destrozando zagas rivales. Lógicamente, sería un necio si no hablara del componente suerte y de la ausencia de DK Metcalf. Con estos dos aspectos del lado Bills Mafia, nuestra defensa desquició a Geno Smith,… Continue reading El ojo del bisonte. Week 9: Miami Dolphins @ Buffalo Bills.

El ojo del bisonte. Week 8: Buffalo Bills @ Seattle Seahawks.

Introducción. Esta noche, a las 21:05 horas (horario peninsular), asistiremos, en el Lumen Field de la hermosa localidad de Seattle (Washington), a un atractivo encuentro interconferencial que medirá las fuerzas de Buffalo Bills y Seattle Seahawks. El conjunto sito en la ciudad esmeralda ostenta un récord de 4 triunfos y 3 derrotas. Tras un inicio espectacular, en el que sumaron 3 victorias, vino un sinuoso camino en el que sufrieron 3 derrotas. Tras el bye y una semana larga para preparar el partido, las huestes aleccionadas por Mike McDonald realizaron un gran encuentro en Atlanta, de donde se llevaron el triunfo ante Atlanta Falcons. Ahora, reciben en su fortín, en el nido del halcón marino, a Buffalo Bills, con la esperanza de sumar su quinta victoria de la temporada, un triunfo que le pondría en una posición muy buena para seguir luchando por una NFC Oeste, que se antoja muy competida este año. Por su parte, las mesnadas dirigidas por el siempre discutido Sean McDermott ofrecieron una perfecta visión de un equipo al puro estilo del Doctor Jekyll y Mr. Hyde, presentando dos caras totalmente antitéticas en el partido que los enfrentó a Tennessee Titans. Una primera parte pésima, especialmente, del lado ofensivo, seguida de una segunda mitad espectacular, quizá, el mejor segundo tiempo de la era Josh Allen. Joe Brady y Bobby Babich quieren romper con estos dientes de sierra, buscar el punto intermedio y tratar de ofrecer una gran visión, un gran partido en los cuatro cuartos del partido. Si Buffalo saliera de Seattle con un triunfo, tendría prácticamente media AFC Este metida en el bolsillo, pudiendo encarar con gran tranquilidad la segunda mitad de la temporada. Análisis de la ofensiva. ¿Cuál es la ofensiva de Buffalo Bills? ¿La patética versión que solo anotó 7 puntos, en la primera mitad, ante Titans? ¿Esa versión simple y ramplona, incapaz de sorprender a la defensiva rival? O bien, ¿ese impresionante ataque que deslumbró a propios y extraños, que supo involucrar a todos sus efectivos y que significó el mejor segundo tiempo desde que el nacido en Firebaugh ejerce como comandante en jefe de nuestra ofensiva? Solo el tiempo lo dirá. Lo único claro es que en el término medio reside el equilibrio, los extremos nunca fueron buenos. Joe Brady demostró que, cuando quiere, puede hacer funcionar a este ataque. Es cierto que la llegada de Amari Cooper, ejerciendo como claro receptor uno, ha puesto en orden todas las piezas del rompecabezas: Dalton Kincaid ya ejerce como clara válvula de escape de Josh, Keon Coleman cuajó una exhibición que le valió para ser considerado rookie de la semana, Ray Davis mostró sus credenciales para aspirar a ser nuestro macho alfa en el backfield, Khalil Shakir sigue deslumbrando  como el receptor con las manos más seguras de la liga… Por tanto, cuál debe ser el plan de juego para enfrentar a una de las zagas más agresivas de la NFL, ideada por una de las mentes defensivas más preclaras de la liga. Pues la respuesta está clara: mantener el nivel de los dos últimos cuartos ante Tennessee Titans. La línea ofensiva tiene que dar un pasito más, no cometer penalizaciones y seguir ofreciendo una gran protección tanto en el pase como a la hora de brindar huecos para nuestra carrera. Spencer Brown, por fin, volvió a ser el mismo que antes de su renovación. Dion Dawkins, ahora mismo, es el eslabón más débil de la cadena, aunque todos sabemos de su calidad. Por su parte, tanto Torrence como Edwards y McGovern deben continuar con las buenas sensaciones ofrecidas en la segunda mitad ante los de Nashville. Josh jugará, por primera vez en su carrera, en el nido del halcón marino, un feudo que se caracteriza por la efervescencia y ruido de su fanaticada. Todo hace indicar que el encuentro se disputará ante una lluvia constante, lo cual hace entrever que Josh tiene que tener mucho cuidado a la hora de evitar pérdidas de balón. La receta está clara: leer bien la defensiva de McDonald, que lanzará muchos blitzes, soltar rápido el ovoide, correr, en scramble, cuando se pueda, asentar el juego terrestre y destrozar una secundaria que no vive días de vino y rosas. En este sentido, vuelve a ser un partido para que gocemos con la mejor versión de Dalton Kincaid y Khalil Shakir. Amari Cooper, con una semana más de entrenamiento, estará aún más integrado e involucrado en el ataque. Y es un día para que Keon Coleman ratifique lo que se está viendo en este inicio de temporada, pudiendo ser muy buscado por Allen en profundo. En el backfield, James Cook, Ray Davis y Ty Johnson se consolidan como uno de los tríos de corredores más en forma de la liga. Será vital que los running backs sean involucrados en el juego aéreo. Y, personalmente, espero aún más snaps para el brillante y potente Ray Davis. Análisis de la defensiva. Bobby Babich está demostrando que sabe realizar buenas lecturas de las propuestas que realizan los ataques rivales. No obstante, nuestra zaga inicia de forma muy pasiva los partidos, recibiendo muchos puntos y acumulando demasiadas yardas. Babich debe, por fin, establecer un buen planteamiento desde el inicio y conseguir que nuestra defensa brille en los cuatro cuartos -y no solo en los dos últimos-. Necesitamos, por tanto, un partido redondo de la defensa. Babich no podrá contar ni con Terrel Bernard ni con DeWayne Carter. En principio, todo parece indicar que el sustituto de nuestro número 43 será Baylon Spector, jugador que, cuando se le ha necesitado, ha ofrecido un gran nivel. Junto al egresado de la Universidad de Clemson, se colocará Dorian Williams, siendo apoyados, en el nickel, por Taron Johnson y, eventualmente, por Cam Lewis. La labor de Spector, Williams y Johnson será vital para tratar de minimizar los acarreos que, sin duda, protagonizarán tanto Kenneth Walker III como Zach Charbonnet. Todo empezará por nuestra línea defensiva, donde contaremos con el retorno de Von Miller. Esperemos que… Continue reading El ojo del bisonte. Week 8: Buffalo Bills @ Seattle Seahawks.

El ojo del bisonte. Week 7: Tennessee Titans @ Buffalo Bills.

Introducción. Esta tarde, a las 19 horas (horario peninsular), asistiremos, en el Highmark Stadium de la localidad de Orchard Park (New York), a un interesante duelo entre Tennessee Titans y Buffalo Bills. El partido supondrá el debut del receptor Amari Cooper, tras su fichaje por Buffalo Bills, a cambio de una tercera ronda y un intercambio de sexta y séptima ronda entre Cleveland Browns y la franquicia del oeste del gran estado de Nueva York. El equipo afincado en Nashville llega a Orchard Park con un récord de 1-4 y tras ser derrotados a domicilio, en la pasada jornada, por Indianapolis Colts. El proyecto de Brian Callahan se tambalea, a las primeras de cambio, ya que, a pesar de un grandísimo desempeño defensivo, su ofensiva no carbura. En este encuentro y ante el mal estado físico del quarterback titular Will Levis, Callahan ha decidido otorgar la titularidad a Mason Rudolph, anhelando un punto de inflexión que suponga el triunfo en este encuentro y un cambio en la inercia negativa de la temporada. Por su parte, las huestes aleccionadas por el cuestionado Sean McDermott, tras su triunfo en un Monday Night Football que no pasará a la historia frente a New York Jets, desean obtener la quinta victoria del año y poner tierra de por medio, en una división que lideran y que, teniendo en cuenta los duelos de Jets ante Steelers y de Dolphins frente a Colts, pueden dejar cerrada, si se dieran los resultados esperados. Existen muchas dudas a ambos lados del ovoide, especialmente en la parcela ofensiva, ya que este ataque no llega a carburar. La llegada de Amari Coopper, que será el indiscutible wide receiver 1, puede alinear todas las piezas y hacer que la ofensiva de Brady, por fin, se vea más regular y productiva. No obstante, la inestabilidad generada ante la mala gestión de los partidos del staff, encabezado por Sean McDermott, deja una zozobra patente entre la fanaticada Bills Mafia. Análisis de la ofensiva. Esta ofensiva no funciona. Los brotes verdes que hicieron acto de aparición en los tres primeros partidos del año, no fueron más que un espejismo. Joe Brady no da con la tecla necesaria para la sostenibilidad del ataque, su playbook es muy predecible y no ha logrado, hasta el momento, involucrar a piezas determinantes, como Dalton Kincaid, Curtis Samuel o Keon Coleman. Mucho se ha hablado de la ausencia de un verdadero receptor uno en este roster. Brandon Beane ha cogido el toro por los cuernos, ha sabido negociar con Cleveland Browns y se ha traído a Amari Cooper, que es, sin duda, uno de los mejores receptores de esta liga, a pesar de lo que muestren sus estadísticas esta temporada. Brady ya no tiene excusas. En  primer lugar, nuestro ataque pasa, inexorablemente, por las manos de Josh Allen. Tras unos partidos en los que se vio a un Allen templado, tranquilo y sabiendo lo que tenía que hacer, los tres últimos partidos (Ravens, Texans y Jets) nos sitúan ante una versión muy minimizada de nuestro quarterback estrella. Allen no está jugando bien, esto es una obviedad. Por tanto, necesitamos la versión del Allen más dominante. Quizá, la llegada de Amari Cooper insufle esa energía y esa motivación de la que, hasta el momento, Allen no ha dado muestras. Una contundente victoria ante unos Titans, que tienen una de las mejores defensas de la NFL, puede ejercer de ese punto de inflexión que haga despegar el ataque de Buffalo, en general, y a Josh Allen, en lo particular. Lógicamente, todo pasa por un crecimiento de nuestra línea ofensiva, que está cometiendo muchísimas penalizaciones absurdas. Spencer Brown, tras su renovación, ha sumado varias actuaciones pésimas, así que es vital que vuelva al buen camino. La mejora tanto en ayuda para la carrera como en protección de pase se antojan decisivas, en este partido ante Titans, que puede ser más trampa de lo que la gente cree. El juego terrestre está funcionando relativamente bien. El rookie Ray Davis realizó una exhibición, en el pasado encuentro ante Jets, demostrando que puede ser una alternativa más que importante a James Cook. El egresado de la Universidad de Kentucky, aparte de su energía y dinamismo en los acarreos, hizo gala de un gran manejo de manos. Es inaudito que Brady no lo haya descubierto antes. James Cook parece que volverá ante Titans, y su participación será muy relevante, ya que la de Titans es la mejor defensiva de la liga frente al pase. Ty Johnson también debería tener su oportunidad en jugadas de corto yardaje y acarreos por el exterior. El establecimiento del juego aéreo será muy complejo, ya que la secundaria de Tennessee está brillando a gran altura. Por tanto, habrá que volver a los cánones más ortodoxos del fútbol americano: pases rápidos, seguros, de corto yardaje y a acumular downs. En este sentido, la llegada de Amari Cooper y  la vuelta, en perfecto estado físico, de Khalil Shakir ayudarán en gran medida. Además, Josh ha de involucrar tanto a Dalton Kincaid como a Keon Coleman, junto, lógicamente, con el uso de los corredores en screens o jugadas de engaño. Si logramos sostener drives largos, que acumulen yardas, iremos desesperando a una grandísima defensa, que ha mantenido a Titans en los partidos, a pesar de su inoperancia ofensiva. Sumar primeros downs, ir avanzando poco a poco, que Josh no sienta la presión y busque a sus válvulas de escape, y alguna carrera en scramble del propio Allen puede ser las claves frente a una defensa que ha arrancado el año en una gran forma. Análisis de la defensiva. Necesitamos un partido redondo de la defensa. Bobby Babich está demostrando que sabe realizar buenas lecturas de las propuestas que realizan los ataques rivales. No obstante, nuestra zaga inicia de forma muy pasiva los partidos, recibiendo muchos puntos y acumulando demasiadas yardas. Babich debe, por fin, establecer un buen planteamiento desde el inicio y conseguir que nuestra defensa brilla en los cuatro cuartos -y no… Continue reading El ojo del bisonte. Week 7: Tennessee Titans @ Buffalo Bills.

El ojo del bisonte. Week 6: Buffalo Bills @ New York Jets.

Introducción. Esta madrugada, a las 02:15 horas -horario peninsular-, en el MetLife Stadium de la localidad de East Rutherford (New Jersey), viviremos un más que particular partido divisional que medirá a New York Jets frente a Buffalo Bills. Ambos conjuntos arriban al choque en medio de una crisis de resultados, y un triunfo supondría el remedio más productivo para cortar de raíz esta inercia negativa. New York Jets llega a este duelo de la AFC Este sacudido por el repentino despido de Robert Saleh, y con la entronización -como técnico interino- de Jeff Ulbrich. Veremos si cambia mucho la versión de estos Jets, con la promoción del -hasta ahora- coordinador defensivo. Lo que está claro es que New York Jets necesita este triunfo para reengancharse a la lucha por la división, igualando, a tres victorias, a Buffalo Bills. Por su parte, Buffalo viaja a New Jersey, tras cosechar sendas derrotas ante Baltimore Ravens y Houston Texans, dejando una pésima imagen en el lado ofensivo del emparrillado. Contra Texans, se reavivaron viejos fantasmas, con inexplicables decisiones, por parte de Sean McDermott, a lo largo y, en especial, al final del partido. El ágil y dinámico ataque de Buffalo Bills, en los tres primeros partidos, se ha convertido en un oasis, en medio del desierto que ha supuesto la ofensiva ante Ravens y Texans. Joe Brady tiene mucho que mejorar y, sobre todo, ha de implicar a sus estiletes aéreos (Kincaid y Coleman). Pero no debemos obviar que Josh Allen no atraviesa su mejor momento de juego, dejando entrever la clásica visión del Allen desdibujado de ciertas fases de la temporada regular. A pesar de todo, Buffalo encara -más por fallos de los rivales que por bondades propias- este partido con la firme determinación de que si triunfa ante Jets -y la semana que viene frente a Titans-, tendrá, en su bolsillo, media AFC Este. Bien dice el acervo popular que “a entrenador nuevo, victoria segura”. Por el bien de nuestros amados Bills, esperamos y deseamos que, en esta ocasión, el saber del pueblo no establezca verdades como puños. Análisis de la ofensiva. ¿Cuál es la verdadera versión del ataque de Buffalo Bills? ¿La ofensiva dinámica, vertical y trepidante que Brady nos ofreció ante Cardinals, Dolphins y Jaguars? O bien, ¿se ha quedado sin playbook y está reciclando la lista de jugadas de su predecesor, convirtiéndose en una chabacana versión llamada “Ken Brady”? Es imposible que a Brady se le haya olvidado lo que ofreció sobre el emparrillado en los primeros encuentros. Si ante Ravens, Brady estiró el campo en horizontal. Ante Texans, Brady dimensionó la ofensiva desde un punto de vista vertical, recordando al más genuino estilo -incoherente- de Ken Dorsey. Si algo tiene que hacer Joe, es buscar un punto intermedio, involucrar a los mejores hombres por aire (Kincaid y Coleman) y sacar el máximo rédito de ese arma de destrucción masiva llamada Josh Allen. El hábitat natural de Josh Allen son los playoffs y, en ocasiones, para él, como definió mi querido amigo Andreas Bluhm, “la verdadera temporada es aquello que empieza tras los 17 partidos de liga regular”. Se ve a un Josh sin sangre, sin motivación, una vil caricatura del Josh más genuino. Al memos, esa es la sensación que nos deja tras las derrotas frente a Ravens y Texans. Este mal desempeño es un arma de doble filo, ya que las temporadas son muy cortas y, a veces, varios fallos, en forma de derrota, suponen la eliminación de playoffs. Josh, querido, no siempre vamos a ganar la AFC Este por el nombre. Necesitamos la mejor versión de Josh. En cierta medida, Joe Brady también es responsable, pero nadie puede ignorar que Josh no está jugando bien. Por tanto, hay que volver a los orígenes, asentar el juego terrestre, involucrar a los efectivos, no centrarse en la jugada larga, mover las cadenas, desquiciar a las defensas y, solo cuando todo eso se consiga, quemar secundarias. Siempre el punto más rápido y directo es la línea recta… y el football es muy sencillo: ganar 10 yardas en 4 intentos. Desde Estampida Bills, estamos seguros que Josh lo sabe. En este partido, Ulbrich va a lanzar todo para tratar de incomodar y generar mucha presión a Josh. El MetLife Stadium es testigo de algunas de las peores actuaciones de Allen. Y Ulbrich también lo sabe. Así que Josh ha de lanzar rápido el ovoide, buscar pases sencillos, involucrar a los corredores en el juego aéreo y leer la defensa de Jets, usando sus piernas cuando la ocasión lo requiera. La línea ofensiva tiene que mejorar su nivel, tanto en protección de pase como a la hora de abrir huecos para la carrera. Para el partido, es seria duda James Cook, así que Ray Davis y Ty Johnson han de estar preparados para asumir un incremento de su rol. Lo que está claro es que, tanto si juega Cook como no, los running backs tienen que participar en el juego aéreo, ayudar en los bloqueos y ser diversos a la hora de correr. ¡Brady, no siempre hay que correr por dentro! Nuestro mejor receptor -utilizado-, Khalil Shakir, también parte como cuestionable antes del inicio del partido y desconocemos si será de la partida. Lo único claro es que Mack Hollins no puede ser el receptor más buscado, obviando a jugadores tan talentosos como Kincaid o Coleman. Además, es preocupante el estado de forma de Curtis Samuel y su uso unidimensional. Lo de Knox es para llamar al presentador de “la nave del misterio”, puesto que cobra mucho, pero ni se le utiliza. Análisis de la defensiva. La ofensiva de Jets es una auténtica incógnita, puesto que Nathaniel Hackett ha quedado reducido al puesto de coordinador ofensivo, sin ser el responsable de cantar las jugadas. De facto, bien es conocido quién será el playcaller… Sí, querido lector, este no será otro que el propio Aaron Rodgers. El gran déficit del ataque de New York Jets es que no está corriendo… Continue reading El ojo del bisonte. Week 6: Buffalo Bills @ New York Jets.

El ojo del bisonte. Week 5: Buffalo Bills @ Houston Texans.

Introducción. Esta tarde, a las 19 horas -horario peninsular-, en el NRG Stadium de la localidad tejana de Houston, viviremos un apasionante duelo entre dos de los grandes aspirantes a la Conferencia Americana. Texans y Bills miden sus fuerzas, siendo acreedores a un récord de 3 triunfos y 1 derrota. En principio, la igualdad será la bandera de este duelo, puesto que, a priori, son equipos muy equilibrados. Houston, tras dos victorias ante Colts y Bears, sufrieron una auténtica asfaltada frente a Vikings. Sin embargo, las huestes aleccionadas por DeMeco Ryans regresaron a la senda del triunfo el fin de semana pasado, en un ajustado duelo divisional ante Jaguars. El equipo tejano ve este partido contra Bills como ese punto de inflexión que, de ganar, puede suponer la entrada de Texans en la fiesta de los grandes equipos aspirantes al anillo. Por su parte, Bills viene de una durísima derrota ante Baltimore Ravens, en un duelo en el que, a pesar del marcador final y de las vicisitudes adversas, Buffalo tuvo ciertas opciones, ya iniciado el tercer cuarto. El equipo entrenado por Sean McDermott quiere dejar atrás el partido en Maryland, dejar claro que solo fue un accidente coyuntural y afrontar, con buena inercia, ese “Mortirolo” que suponen las visitas a Texans y Jets. Si el equipo sale de este duro inicio de calendario con 5 victorias, la senda a los Playoffs estará bien encaminada. El duelo tendrá, en cierta manera, esa esencia de revancha, ya que Stefon Diggs y Josh Allen se verán, por primera vez, desde la salida del receptor de Buffalo. Josh ya hizo unas declaraciones en las que dejó un “recadito” para el egresado de la Universidad de Maryland, aludiendo a que se juega muy bien cuando tus receptores miran por el equipo y no por estadísticas individuales. Veremos cómo responde Stefon sobre el emparrillado, pero el morbo está asegurado. Por último, será la primera ocasión en la que CJ Stroud y Josh Allen compitan con sus ofensivas. No olvidemos las declaraciones del joven jugador salido de la Universidad de Ohio State, en las que obviaba al bueno de Josh dentro del Olimpo de los grandes quarterbacks de la NFL, erigiéndose él mismo en el peldaño inferior a Patrick Mahomes. Tanto por lo deportivo como por lo extra-deportivo, este enfrentamiento entre Texans y Bills asegura espectáculo y mucha diversión. Análisis de la ofensiva. Las sensaciones ante la férrea y ciclópea defensiva de Ravens no fueron nada buenas. Es cierto que el ataque funcionó, en ciertas fases del encuentro; sin embargo, en el momento clutch, Joe Brady fue demasiado osado, no midió bien el riesgo de esa jugada fantasía y las esperanzas de remontada se esfumaron. Por tanto, Joe debe volver a los orígenes: asentar el juego de carrera y tratar que la línea ofensiva funcione. Esos dos aspectos son básicos, si Buffalo Bills quiere salir del estado de la estrella solitaria con su cuarta victoria de la temporada. Tenemos que correr y valores tenemos para ello. James Cook está a un grandísimo nivel y tanto Ray Davis como Ty Johnson cumplen, a la perfección, su rol dentro del backfield. No obstante, el front seven de Texans es muy fuerte (Anderson, Hunter, Edwards, Fatukasi, Al-Shaair, To’oTo’o y Pitre). Así que ese duelo en las trincheras va a ser decisivo. Necesitamos la mejor versión de la guardia pretoriana de Josh. Dawkins, Brown, Torrence, Edwards y McGovern han de dar el 100% de su rendimiento, tanto en protección a Josh como a la hora de abrir huecos, para ir estableciendo nuestro juego terrestre. Allen ha de seguir mostrando la serenidad y templanza que es su mejor carta de presentación, en este inicio de temporada. Estoy seguro que Ryans va a buscar las inestabilidad de Josh, a través de cargas continuas y una presión constante. Sin duda, es un partido para que Josh trate de buscar pases rápidos y certeros en el primer nivel, teniendo siempre como objetivo la espalda de sus linebackers o ensanchando el emparrillado hacia la zona flat. Pero no debemos caer en la dinámica del pasado partido entre Ravens. Ensanchar, sí, pero también alargar el campo. En este sentido y ante la ausencia de Khalil Shakir, debe ser un encuentro para Dalton Kincaid. El juego de tights end se le está dando mal a la defensiva de Texans, así que Josh ha de sacar el máximo rédito a los pases rápidos a Dalton. Del mismo modo, creo que puede ser un duelo para que los corredores sumen muchas yardas a través del juego aéreo. Incluso, en esta ecuación han de entrar tanto Dawson Knox como Curtis Samuel. Si el juego de carrera se establece, el ataque aéreo avanza a través del primer y segundo nivel, y Josh asusta con alguna arrancada en scramble, este será el momento idóneo para que Allen trate de buscar en profundo a amenazas como Keon Coleman, Mack Hollins o Marquez Valdes-Scantling, teniendo en cuenta los problemas de Houston en secundaria. Coleman ya dio muestras del gran receptor que puede llegar a ser, atrapando dos pases en  la zona de los números, ante la secundaria de Ravens, y espero que el duelo, en Houston, marque un punto de inflexión para el bueno de Keon. Por otro lado, hemos de ser productivos en red zone y transformar en puntos nuestras llegadas a este área. Además, el ataque tiene que consumir reloj y tratar de ayudar a la defensa, ya que la ofensiva de Houston es una de las más explosivas y dinámicas de la competición. Por último, el duelo en equipos especiales parece muy de cara para Houston, ya que Tyler Bass sigue con un rendimiento demasiado irregular. Análisis de la defensiva. La baja de Joe Mixon y las serias dudas físicas de Dameon Pierce hacen que el ataque de Houston Texans se vuelva demasiado unilateral, en beneficio, lógicamente, del juego aéreo. Cam Akers y Dare Ogunbowale pueden ser los únicos corredores sanos y deben ser los responsables del juego terrestre de… Continue reading El ojo del bisonte. Week 5: Buffalo Bills @ Houston Texans.

El ojo del bisonte. Week 4: Buffalo Bills @ Baltimore Ravens.

Introducción. Esta madrugada, a las 2:20 horas en España, se enfrentarán, en el M&T Bank Stadium de Baltimore (Maryland), dos de los grandes contendientes al campeonato de la AFC. Baltimore Ravens y Buffalo Bills medirán sus fuerzas, en un encuentro que puede decidir muchas cosas de cara al futuro de ambas franquicias, en la temporada 2024. Los Ravens, tras sus dos primeras derrotas frente a Chiefs y Raiders, lograron sobreponerse a ese inquietante 2-0, imponiéndose, en un partido que se los complicó muchísimo, a Dallas Cowboys. Ahora, necesitan el triunfo ante unos Bills en plena racha, si no quieren que un rival directo les saque tres partidos y si no desean que se les empiece a complicar, incluso, la división (teniendo en cuenta el fulgurante inicio de Pittsburgh Steelers). Por su parte, Buffalo, tras dejar excelentes sensaciones -tanto ofensivas como defensivas-, en sus  tres primeros encuentros del año, anhelan dar un puñetazo sobre la mesa de la NFL, ganar en el nido de los cuervos, poner tierra de por medio con Ravens e iniciar con buen pie su periplo de tres partidos a domicilio. Lamar contra Josh, McDermott frente a Harbaugh… Todo está presto y dispuesto para presenciar uno de los mejores partidos de la jornada, con mucho más, en juego, que una simple victoria. Análisis de la ofensiva. Si tu rival tiene, hasta el momento, la peor defensa por aire de la liga, una zaga nque está siendo destrozada en los tres niveles del emparrillado, está claro cuál debe ser el plan de juego, desde el punto de vista ofensivo… Muy sencillo, ¿no? Pero, quizá, en ocasiones, no siempre dos más dos suman siempre cuatro. Está claro que la defensa de Baltimore, tras la marcha de Mike McDonald, no está siendo la misma. Al menos, su defensa contra el pase, ya que, contra la carrera, la zaga cuerva sigue siendo un muro -casi- infranqueable. Todo nos hace indicar que Brady diseñará un esquema ofensivo, basado en la preponderancia del juego aéreo. Pero, queridos lectores, no todo es tan sencillo en la Bills Mafia. En principio, Zach Orr, coordinador defensivo de Baltimore, planteará un escenario, en el que se anule el juego terrestre de Buffalo, se embolse a Allen dentro del pocket, y este se vea obligado a lanzar, ante la presión que, claramente, crearán Madubuike, Jones, Van Noy, Oweh, Simpson o Smith. Esta es la teoría, pero la práctica nos dice que la clave del partido puede pasar por tres factores claves. En primer lugar, se necesita la mejor versión de nuestra línea ofensiva. Una unidad a la que Aaron Kromer le está sacando el mejor partido y que está mejorando encuentro tras encuentro. Efectivamente, el inicio a la victoria, en el M&T Bank Stadium, pasa porque el interior de la guardia pretoriana de Josh Allen (Edwards, Torrence y McGovern) sepan contener las embestidas de Madubuike y compañía, otorgando el tiempo necesario para que Josh telegrafíe la defensa de Ravens. Lógicamente, por el exterior, también  se presupone la presión de Baltimore, pero considero que su mayor baza es el interior de su línea defensiva. En segundo lugar, otra de las claves será bombardear su zona intermedia, justo detrás de la espalda de los linebackers, donde más sufre esta zaga. Andy Reid y Antonio Pierce ya nos dieron la receta, así que la zona underneath debe ser, sin duda, el principal objetivo de Josh. Se infiere que va a ser un partido para que Dalton Kincaid, Dawson Knox, Khalil Shakir y Curtis Samuel generen una cantidad ingente de yardas. En tercer lugar, si el pocket colapsa y la defensa de Ravens se rompe, será el momento idóneo para que Josh pueda desequilibrar el partido con jugadas en scramble, en las que muestre su peligrosidad por tierra. Hace dos temporadas, las jugadas rotas, en las que Josh ganaba muchas yardas, fueron la causa principal de aquella remontada de Bills, en un encuentro que parecía totalmente finiquitado, en favor de Ravens. En un mundo perfecto, el camino a la victoria pasaría por asentar el juego terrestre, involucrando también a Cook, Davis y Johnson en las jugadas aéreas de corto yardaje. Si los acarreos funcionan, nuestro ataque va avanzando y quemando reloj, ante la hipotética desesperación de Baltimore, puede ser el momento propicio para que Josh busque en profundo a Keon Coleman o Marquez Valdez-Scantling. No obstante, lo más importante es que los pases largos sean solo un recurso y no la base principal de nuestra ofensiva. Ravens tratará de jugar a eso, a los potenciales fallos de Josh. Sin embargo, hasta el momento, estamos viendo al Allen más sereno y tranquilo de su carrera deportiva. Esta madrugada se enfrentará a una de las mejores defensas de la liga, así que esperemos que el Josh, símbolo de la templanza, siga siendo la versión dominante del natural de Firebaugh. Análisis de la defensiva. Steve Spagnuolo, ese genio defensivo tan poco reconocido, ha dado la clave, en sus dos últimos enfrentamientos, para anular el ataque de Baltimore Ravens. La teoría parece fácil, ¿será tan sencillo ponerla en práctica? Si hubiese un manual de instrucciones para aniquilar la ofensiva cuerva, las líneas de actuación serían muy plausibles: trata de minimizar los acarreos de Lamar Jackson, frena sus carreras por el exterior, mantenlo dentro del pocket y déjalo que gane el partido por aire, pues el error llegará. Teniendo en cuenta este plan, Bobby Babich diseñará las acometidas de una zaga que está rindiendo a un grandísimo nivel, haciendo gala de esa máxima tan manida de “defensa de hombres y no de nombres”. Taron Johnson y Terrel Bernard, dos de los baluartes de nuestra zaga, volverán a ser baja. Sin embargo, sus sustitutos, Cam Lewis y Baylon Spector, están rindiendo a un nivel colosal. Con la inestimable ayuda del versátil Ja’Marcus Ingram, que está creciendo en cada partido y que es ese defensive back capaz de funcionar como cornerback, ayudar a los safeties o, incluso, subir a la caja. Un tipo con el sello más genuino… Continue reading El ojo del bisonte. Week 4: Buffalo Bills @ Baltimore Ravens.

El ojo del bisonte. Week 3: Jacksonville Jaguars @ Buffalo Bills.

Introducción. Esta madrugada, a la 1:30 horas en España, se enfrentarán, en el Highmark Stadium de la localidad de Orchard Park, dos equipos, con trayectorias e inicios muy distintos, que, en los últimos años, están muy acostumbrados a verse las caras. Jacksonville se está convirtiendo en la auténtica bestia negra de Buffalo Bills, ya que ha salido triunfante en seis de los últimos nueve enfrentamientos. Doug Pederson, Trevor Lawrence y compañía viajan al oeste del gran estado de Nueva York heridos en su orgullo, tras haber caído en los primeros partidos de la temporada. El juego no ha sido tan malo en estos dos encuentros, sin embargo, la sensación de equipo sin personalidad es lo que más preocupa a la fanaticada jaguar. Por su parte, Buffalo Bills arriba a este encuentro con plena confianza, tras haber triunfado en los dos primeros partidos y haber dado un golpe sobre la mesa, tras la contundente victoria en el Hard Rock Stadium ante Miami Dolphins. El triunfo es muy necesario para ambos conjuntos, puesto que, tras la derrota de Houston Texans, Jaguars podría reengancharse a la lucha por la AFC Sur. Buffalo quiere llegar con 3-0, ya que le viene, en las próximas semanas, su particular cuesta de enero, puesto que tendrá que rendir visita, en tres semanas consecutivas, a Ravens, Texans y Jets. Análisis de la ofensiva. Joe Brady nos está enseñando que sabe preparar a la perfección los partidos… y lo que es más importante: sabe adaptarse a lo que la defensiva rival le propone sobre el emparrillado. Frente a Cardinals, supo recuperar a Josh Allen, tras un fumble absurdo, erigiéndolo en el indiscutible adalid ofensivo del encuentro. Sin embargo, ante Dolphins, fue Cook el agente más importante, quedándose Allen como un simple personaje verista, que, apenas, tuvo que rendir al máximo de sus posibilidades. Adaptación al medio, sin duda, es la mejor definición para la ofensiva de Brady en estos primeros compases de la temporada. A priori, se espera que la defensa de Jacksonville trate de generar mucha disruptividad en el pocket, intentando una presión contenida a Josh Allen, tratándolo de forzar a lanzar y buscando sus fallos en el pase. Por tanto, es un encuentro para que Josh sienta la ayuda de su guardia pretoriana. Efectivamente, necesitamos de la mejor versión de Dawkins, Torrence, Brown, Edwards y McGovern. La línea ofensiva está jugando bien, dejando atrás el dudoso inicio, en cuanto a penalizaciones sin sentido, del encuentro ante Cardinals. Si la OL ha de hacer su cometido ante las embestidas de Josh Hines-Allen, el primer nivel de pase ha de ser la válvula de escape de Josh. Sin duda, necesitamos, por fin, un gran partido de Dalton Kincaid. La mejor manera de sortear esa inminente presión de su linea defensiva será a través de certeros pases al propio Kincaid, Shakir, Knox o Samuel. Sin duda, este será el encuentro perfecto para probar jugadas de engaño, jet sweeps, así como un bombardeo en las zonas underneath, flat y slant. Por otro lado, el juego terrestre, con Cook a la cabeza, deberá seguir siendo protagonista. No obstante, espero que se involucre más a Ray Davis, con Ty Johnson en jugadas de corto yardaje. Además, sería una gran noticia que los corredores sean agentes importantes en el juego por aire. Si el ataque va asentándose, quemando reloj y desmoralizando a la defensa de Jaguars, será el momento idóneo para que Josh busque, en profundo, a Keon Coleman, Marquez Valdes-Scantling o Mack Hollins. Sería música para los oídos de la Bills Mafia que Keon, por fin, anote su primer touchdown en el circo profesional. Tras un grandísimo debut ante Arizona, estuvo totalmente desaparecido frente a Miami, a pesar de que jugó todos los snaps. No involucrar a Kincaid y Coleman es, hasta el momento, el gran debe de la ofensiva de Brady. Por último, todo pasa por Josh, por sus decisiones, por sus lecturas. Tiene que seguir la senda que ha iniciado de gran gestor de los partidos, sin presión, sin locuras. Con esta versión de Josh, menos hercúlea y protagonista -solo cuando se le ha necesitado-, el camino hacia los triunfos parece más expedito. Análisis de la defensiva. Bobby Babich ha confeccionado una defensa con sello propio, una defensiva más de hombres que de nombres. No es fácil conseguir que tu defensiva funciona cuando no puedes contar con tres de tus mejores hombres y líderes de la zaga. Milano cayó, posteriormente, hizo lo propio Taron Johnson; finalmente, Terrel Bernard, el hipotético Alpha de esta defensa, también está fuera. Babich ha sabido involucrar a todos sus efectivos. Y lo mejor de todo es que, hasta el momento, las bajas no se están notando, puesto que Dorian Williams, Cam Lewis y Baylon Spector están asumiendo perfectamente sus funciones. El plan de guerra para minimizar la ofensiva de Jacksonville pasa por ejercer mucha presión sobre Trevor Lawrence. Será la primera vez que el egresado de la Universidad de Clemson pise el emparrillado del Highmark Stadium. Por tanto, nuestra defensiva ha de hacerle ver lo difícil y duro que es jugar un snap en feudo de la Bills Mafia. Mucho se ha hablado de la poca comunicación existente entre Trevor y su staff técnico. Si sumamos los decibelios que habrá en Orchard Park, la desconexión, tanto con sus técnicos como con sus compañeros, puede ser la premisa dominante. El soldado Miller parece que se ha salvado… y lo ha hecho él mismo. Ante Miami, vimos al mejor Von de los últimos años. Necesitamos que esa versión no sea “beta”, sino que sea la original y genuina. Rousseau y Epenesa, por el exterior, y Jones y Oliver, por el interior, deberán hacer que Lawrence sienta pánico. Será muy importante frenar la carrera, que llegará de la mano de Etienne y Bigsby. Se presupone que Bigsby percutirá más por el interior, dejando las carreras por el exterior a Etienne. Habrá que tener especial cuidado con la faceta aérea de Travis, ya que podría hacernos muchas yardas, tras… Continue reading El ojo del bisonte. Week 3: Jacksonville Jaguars @ Buffalo Bills.

El ojo del bisonte. Week 2: Buffalo Bills @ Miami Dolphins.

Introducción. Esta madrugada, a las 2:15 horas en España, seremos testigo de un apasionante duelo divisional, que medirá a dos enemigos acérrimos: Miami Dolphins y Buffalo Bills. Ambos equipos vienen de conseguir una sufrida victoria, en sendos partidos, en los que ambos sufrieron más de lo esperado. Lógicamente, tal y como han afirmado Sean McDermott y Mike McDaniel, existen muchas cosas que implementar, pero siempre se construye mejor desde un triunfo que desde una derrota. Las condiciones meteorológicas, a pesar de la hora (20:15, hora de Florida) y de la aparente elusión del calor de Miami Gardens, marcarán el encuentro, ya que se espera un 80% de humedad y lluvia intensa al inicio del arranque del encuentro, en el Hard Rock Stadium. Este duelo divisional, ante lo aparente que se espera sea la AFC Este, puede valer doble, ya que no solo se sumará una victoria ante un rival de la división, sino que, en lo moral, tendrá especial relevancia. Buffalo Bills cuenta por victorias 11 de los últimos 12 encuentros ante Miami Dolphins, siendo la auténtica bestia negra de Mike McDaniel, Tua Tagovailoa y compañía. No obstante, tanto el propio head coach como Zach Sieler, defensive tackle de los del sur de la Florida, han hablado de esa necesidad de poner fin a un ciclo de claro dominio de la franquicia sita en el noroeste del estado de New York y marcan este partido como punto de inflexión de un nuevo ciclo. Sea como fuere, sin duda, será un partido de alta tensión, del nervios, de espectáculo… Un encuentro en el que está mucho más en juego que la segunda victoria de ambas franquicias. Análisis de la ofensiva. Si algo funciona, para qué cambiarlo. Esta premisa tan básica será, sin duda alguna, el lema del que hará gala Joe Brady, coordinador ofensivo de Buffalo Bills, ante el primer gran duelo divisional de esta temporada. En efecto, la ofensiva de Buffalo Bills, bajo el sello de Joe Brady, se ha caracterizado por asegurar el control del ovoide, consumir mucho tiempo de posesión y dominar el marcador desde la implantación de la carrera y la seguridad de los pases en el primer nivel. Por tanto, este hipotético guion será el que marque el ataque de Buffalo Bills esta madrugada. Josh Allen se librará, por vez primera en mucho tiempo, de esa bestia negra defensiva, que siempre le ha amargado, en sus duelos ante los Dolphins: Christian Wilkins. Será capital que Josh gestione bien sus emociones ante los mil y un ardides que le tejerá Anthony Weaver, coordinador defensivo de Miami. Además, no olvidemos que Jordan Poyer está, ahora, en su secundaria y conoce bien a Josh. Josh ha de mover bien las cadenas, asegurar el ovoide, no rifar ningún lanzamiento y usar, cuando lo necesite, sus piernas fuera del pocket. No olvidemos que, en estos duelos, las yardas de Allen en scramble han dinamitado -siempre- la defensiva dolphin. Josh no ha de volverse loco y ha de tratar de ir avanzando yarda a yarda, con pases en el primer nivel, involucrando a Dalton Kincaid, Khalil Shakir, Curtis Samuel y Dawson Knox. La espalda de los linebackers y la zona flat serán, sin duda, zonas de abono seguro, en las que germinarán los pases del nacido en Firebaugh (California). Todo debe de ser iniciado con un sólido establecimiento de la carrera. Ya hemos visto lo bien que abrió huecos la línea ofensiva a James Cook, por el interior, Pero necesitamos que Brady mande más carreras por el exterior, con el propio Cook o Ty Johnson. Además, Ray Davis, tras su gran drive ante Cardinals, tendrá mucho que decir en este partido. Los tres corredores han de sumar también yardas por aire, sumándose como válvulas de escape de Josh, ante la más que esperada presión que la línea defensiva de Dolphins tratará de generar. Si la carrera queda establecida y el ataque va consumiendo tiempo y va avanzando y desesperando a la zaga de Miami, será el momento perfecto para que Josh trate de buscar en profundo a Keon Coleman y Mack Hollins. Coleman cuajó un auténtico partidazo ante Arizona. Sufrió los férreos marcajes de la defensa, se fajó con los cornerbacks y dejó una carta de presentación, en forma de recepciones, que ya ilusionan a la #BillsMafia, Tema capital será la utilización de Dalton Kincaid, que estuvo desaparecido en el encuentro debut de la temporada. Tanto McDermott como Brady hablaron de que el egresado de la Universidad de Utah estuvo muy marcado durante este partido. No obstante, si Buffalo quiere alcanzar grandes cotas esta temporada, estas pasan porque Dalton sea un hombre muy importante en la ofensiva. Por último, la línea ofensiva tiene que cometer menos penalizaciones y requerimos de un Torrence que se asemeje a la versión de la pasada temporada. Análisis de la defensiva. Si no puedes parar a un ataque explosivo y a unos receptores tan ágiles y dinámicos como Tyreek Hill y Jaylen EWaddle, al menos, trata de minimizar el daño que estos pueden ocasionarte, A veces, en el football, lo más racional es la base del éxito. Bobby Babich ha demostrado, a lo largo de su carrera, ser un entrenador muy racional y coherente. Para muestra el partido de la semana pasada, en la que tuvo que sobreponerse a la lesión de Taron Johnson, a los fallos de placaje y a un inicio penoso de la defensa. Supo ajustar y la defensa creció, enormemente, en la segunda mitad. Esta madrugada llega el más difícil todavía y veremos de qué pasta está hecha la defensiva creada por Babich. La ofensiva de Miami será una dura prueba, puesto que tiene todos los ingredientes para hacernos mucho daño. Lógicamente, el duelo se puede decidir por un “match up” muy desfavorable para nuestra defensiva. Mike McDaniel sabe sacar el máximo rendimiento a esa sinergia existente entre Tua Tagovailoa y sus dos peligrosos y rápidos estiletes, Jaylen Waddle y Tyreek Hill. La verticalidad y dinamismo de Waddle y Hill pueden hincarse,… Continue reading El ojo del bisonte. Week 2: Buffalo Bills @ Miami Dolphins.

El ojo del bisonte. Week 1: Arizona Cardinals @ Buffalo Bills.

Introducción. Mañana domingo, a las 7 de la tarde -hora española-, asistiremos al debut de Buffalo Bills y Arizona Cardinals, en el Highmark Stadium de la localidad neoyorquina de Orchard Park. Decía el escritor Víctor Hugo, “el futuro tiene muchos nombres. Para los débiles, el fracaso. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes, la oportunidad”. Y, sinceramente, una oportunidad es lo que buscan Cardinals y Bills. Los de Arizona anhelan ratificar un proyecto -el de Jonathan Gannon-, que ya, la pasada temporada, dejó muestras de seriedad y de brotes verdes. Mientras que Buffalo Bills desea aprovechar el olvido, el vilipendio y el menosprecio mediático, tras los movimientos de offseason, para poner los mimbres de un proyecto que pueda, esta temporada, aspirar a todo. Asistiremos al debut profesional del wide receiver Marvin Harrison Jr., un jugador destinado a marcar una época dentro de la NFL. Josh Allen volverá a verse las caras con Kyler Murray, tras aquel infausto partido en el desierto, que se decidió con ese funesto “hail mary”, atrapado por DeAndre Hopkins. El duelo supondrá el debut oficial de los dos nuevos coordinadores de Buffalo Bills: Joe Brady (que abandonará su rol de interino) y Bobb Babich. Dos coordinadores destinados a cambiar el sino de Buffalo Bills… o eso, al menos, suspira la #BillsMafia. Las apuestas dan como claro favorito a Buffalo, por 7 puntos. Pero la igualdad, en el emparrillado, se presupone más patente que lo que se marca en Las Vegas. Análisis de la ofensiva. Sin duda, el duelo puede estar marcado por la hipotética falta de mordiente del pass rush de la defensa de Arizona Cardinals. Ya la temporada pasada, la zaga cardinal tuvo muchos problemas para generar presión sobre el mariscal de campo rival. Este año han sufrido la lesión de su prospecto de primera ronda Darius Robinson. Por tanto, se presupone que Nick Rallis, defensive coordinator de Arizona, lanzará muchos paquetes de blitz, para tratar de incomodar a Josh Allen. En este sentido, habrá que prestar especial atención a jugadores como Budda Baker, Dennis Gardeck, Mack Wilson Sr. o Kyzir White. Toda la fanaticada de Bills tenemos muchas dudas acerca del funcionamiento de una línea ofensiva renovada, no tanto en nombres, sino, más bien, en roles. La decisión de elegir a Connor McGovern como center, en detrimento de Sedrick Van Pran, escuece enormemente. No obstante, considero que, más pronto que tarde, la coherencia se impondrá. McGovern volverá al guard, Van Pran asumirá el centro y Edwards esperará su oportunidad en la banda. Lógicamente, espero el nivel del pasado ejercicio por parte de Dion Dawkins, Spencer Brown y O’Cyrus Torrence. No obstante, hay que hablar de lo coyuntural y no centrarse en lo estructural. La guardia pretoriana de Josh ha de concederle el tiempo necesario para que pueda escanear una defensiva que, aunque no presione mucho, es muy peligrosa en la secundaria, pues acumula calidad y cantidad. Sería muy bueno que Josh fuera destrozando la zaga cardinal con pases certeros en el primer y segundo nivel, tratando de asolar su zona underneath y flat. Para ello, será fundamental el desempeño de Dalton Kincaid, Curtis Samuel, Khalil Shakir, Dawson Knox o, incluso, los running backs. Si el ataque aéreo se asiente y consigue avanzar, será el escenario más propicio para tratar de quemar a sus cornerbacks, con pases a Mack Hollins y Keon Coleman. Otro aspecto vital será el desempeño de Josh en scramble, aprovechando su velocidad y fuerza fuera del pocket, aspecto que puede romper completamente el partido. Por último, será necesario que se asiente el juego terrestre… de múltiples formas. Confío mucho, lógicamente, en James Cook, pero Ray Davis y Ty Johnson van a tener su rol, en este partido. Cuando hablo de que funcione el juego terrestre, me refiero a que tienen que estar involucrados en carreras por el interior, por el exterior y, sobre todo, en el juego aéreo. Tengo muchas ganas de ver cómo involucra Joe Brady a Ray Davis, por aire. Análisis de la defensiva. Ese Rey Midas -que transmuta en oro todo lo que toca-, llamado Bobby Babich, tendrá la oportunidad, que lleva años anhelando. Tenemos muchísimas ganas por ver cómo plantea el partido y, sobre todo, cómo realiza la contralectura que la ofensiva de Cardinals realizará sobre su planteamiento inicial. Somos sufridores de las no lecturas de McDermott, así que una brisa de aire fresco, en la defensiva y en las decisiones de esta zaga, suponen un auténtico clímax para la #BillsMafia. El planteamiento lógico y racional sería tratar de contener a Kyler Murray dentro del pocket, obligándolo a lanzar. No debemos olvidar que el egresado de la Universidad de Oklahoma tiene una capacidad innata para hacer mucho daño fuera del pocket, gracias a su velocidad y dinamismo. Si conseguimos maniatar al diminuto Murray, deberemos, posteriormente, desconectar a dos jugadores que, el año pasado, rindieron a un grandísimo nivel: James Conner y Tre McBride. Conner será la indiscutible punta de lanza de esta ofensiva, mientras que McBride será la válvula de escape de Murray, cuando sienta la presión que se presupone acometerán Greg Rousseau, AJ Epenesa y Von Miller. El interior de nuestra línea defensiva -Ed Oliver, Daquan Jones y DeWayne Carter-, junto con la pareja de linebackers, tendrá que minimizar los acarreos de Conner. Por su parte, Terrel Bernard más el otro linebacker -ya sea Dorian Williams o Nicholas Morrow- deberán ayudar a frenar el juego terrestre y a tratar de secar a McBride. Taron Johnson ha de ser nuevamente protagonista, tratando de ejercer de unión entre el front seven y la secundaria, ayudando en todos los niveles. Por último, no menospreciemos ni a Marvin Harrison Jr., que tendrá muchas ganas de demostrar su valía, ni a Greg Dortch ni a Micael Wilson, jugadores muy rápidos que pueden generar problemas en profundo. Tanto Rasul Douglas como Christian Benford han de amargar el debut de Harrison, haciéndole entender que una cosa es el College Football y otra muy distinta, el circo profesional. Sin duda, nuestra unidad… Continue reading El ojo del bisonte. Week 1: Arizona Cardinals @ Buffalo Bills.

El ojo del bisonte. Ronda Divisional: Kansas City Chiefs @ Buffalo Bills.

Introducción. La madrugada del domingo al lunes, a las 00:30 horas, las cámaras de la cadena norteamericana CBS serán testigo del partido de los partidos, de la batalla de las batallas, una nueva épica edición de un duelo entre Josh Allen y Patrick Mahomes, entre Buffalo Bills y Kansas City Chiefs.  Bills y Chiefs vuelven a citarse, dos años después, en Ronda Divisional, pero con un cambio de escenario, ahora, el marco de este alucinante envite será el Highmark Stadium de Orchard Park. Será la primera vez que Patrick Mahomes afronte un encuentro de playoffs sin el factor de localía a su favor, Super Bowls aparte. Este va a ser el tercer duelo entre Bills y Chiefs, en playoffs, desde que Mahomes y Allen lideran ambos ataques, con un pleno de victorias para la franquicia sita en el estado de Missouri.  Kansas City Chiefs arriba a Orchard Park con la moral por las nubes, tras doblegar, con una superioridad insultante, a Miami Dolphins, en la ronda de Wild Card. Mucho se ha hablado de la controvertida temporada de Kansas City y de las dudas que ha generado partido tras partido. Sin embargo, en cuanto el telón de los playoffs se alzó, se vio la mejor versión de Andy Reid y Patrick Mahomes. Chiefs llega a este encuentro con 48 horas más de descanso, debido a que el partido de Bills contra Steelers tuvo que retrasarse por el temporal de viento y nieve, que sigue asolando el gran estado de Nueva York.  Por su parte, para Buffalo Bills, para Allen, Diggs, McDermott y toda la Bills Mafia, este es el PARTIDO, nuestro encuentro soñado, el reto al que queríamos enfrentarnos desde aquellos fatídicos y cruentos 13 segundos. Sin duda, el indiscutible factor en el que Buffalo Bills es netamente superior -factor local aparte- es el motivacional. Nuestros jugadores llevan esperando, desde el 23 de enero 2021, que la Divina Providencia les diera una nueva oportunidad de medirse a Kansas City Chiefs en un partido de todo o nada. No obstante, el hambre, las ganas, el deseo de vencer a Chiefs, no debe de convertirse en una pesada carga y se ha de tener claro que el partido no se ganará en el primer drive, sino después de cuatro cuartos o un tiempo extra. Así que Josh debe jugar sin presión, con tranquilidad, demostrando que es uno de los mejores quarterbacks de la liga.  Uno de los aspectos cruciales en este encuentro será el capítulo de las bajas. La victoria frente a Pittsburgh Steelers fue muy costosa para Buffalo Bills, ya que en ese partido se lesionaron Terrel Bernard, Christian Benford, Baylon Spector y Taron Johnson. Para este duelo ya han sido descartados Gabe Davis, Taylor Rapp, Benford y Spector. Todo parece indicar que Rasul Douglas, Tyrel Dodson, Taron Johnson y el propio Terrel Bernard jugarán ante Chiefs. Además, Sam Martin también es seria duda para este partido, llegando incluso Bills a reclutar a Matt Haack, por si Martin no estuviera disponible para este encuentro.  Las apuestas dan ganador a Buffalo Bills por 3 puntos, en un duelo que se presupone será de un 50% de posibilidades para equipo. Cualquier nimio detalle puede desequilibrar la balanza de un  duelo que será muy cerrado y que, a priori, se decidirá en los últimos segundos.  Mahomes y Allen volverán a verse las caras… – us.as.com Análisis de la ofensiva. Joe Brady -que será entrevistado por Atlanta Falcons para su vacante como head coach– tiene ante sí el partido más importante del su carrera, puesto que se enfrentará, en playoffs y como coordinador ofensivo de Bills, a la mejor defensa de la liga, una zaga que ha allanado el camino a playoffs del actual campeón de la NFL. Tendrá enfrente a Steve Spagnuolo, uno de los mejores coordinadores defensivos de la liga cuando los partidos son a muerte, un preparador que sabe ajustar perfectamente siempre que la ocasión lo requiere. Brady demostrará la madrugada del domingo al lunes de qué pasta está hecho.  En primer lugar, Buffalo Bills tiene que asentar su juego terrestre. Es fundamental que volvamos a ver una gran versión de James Cook, un Cook que promedió 5’8 yardas por acarreo, en  el partido ante Chiefs de la Week 14. El juego terrestre ha de consolidarse de la manera más ortodoxa o más heterodoxa, todo cuenta. Por tanto, Cook, Latavius Murray y Ty Johnson han de tratar de percutir por el interior. Sin embargo, la clave del partido puede estar en tratar de hacer daño con carreras externas, donde la zaga de Chiefs presenta más dudas. En este sentido, Cook y Johnson pueden erigirse en grandes protagonistas. Cuando he hablado de correr de forma heterodoxa, me refiero a que los corredores generen yardas. Yardas que pueden llegar saliendo a recibir desde el backfield, ya sea con screens, jet sweeps o pases en la zona flat o underneath.  Nuestra línea ofensiva tiene que mantener el gran nivel mostrado ante Steelers. Morse, McGovern, Torrence, Dawkins y Brown han de otorgar el tiempo necesario para que Josh trate de descifrar los enigmas que, a buen seguro, Spagnuolo le ofrecerá. La de Chiefs es una defensa que aguanta mucho, casi hasta 5 segundos antes de iniciarse el snap, para enseñar sus movimientos. Por tanto, Allen tiene que estar más seguro que nunca, no conceder nada y no regalar el ovoide tratando de asentar nuestro ataque, con drives seguros y sostenidos. ¿Cómo se consigue esto? Lógicamente, nuestra línea ofensiva ha de ayudar a generar huecos para nuestros running backs. Además, han de resguardar a Allen de las acometidas de Chris Jones, George Karlaftis y los blitzes que, sin duda, protagonizarán Nick Bolton y Trent McDuffie.  Otra de las grandes claves del encuentro será que Buffalo ensanche y alargue el emparrillado, forzando a que su defensa juegue muy larga. Esto se puede conseguir multiplicando los potenciales targets de Josh en la zona flat y forzando a que sus safeties y cornerbacks se vean obligados a seguir a… Continue reading El ojo del bisonte. Ronda Divisional: Kansas City Chiefs @ Buffalo Bills.