TRB – El susurro de Buffalo

Tarde de domingo en Buffalo, y la afición celebra la vuelta a casa de los partidos de los Bills. Como siempre antes de empezar el partido, la afición se reúne para calentar motores.

Lástima que nuestro equipo no hiciera lo mismo, ya que los primeros drives, tanto de ataque, como de defensa, se vio a un equipo, que no encontraba su sitio. ¿Y que pasó? Touchdown de los Raiders en los primeros compases del partido. Si, de por sí, ya veníamos tocados del partido anterior frente a los Jets, esto parecía el principio del declive del equipo este año.

No sé si serían las alitas o el echarse Allen el equipo a la espalda, como casi siempre, que salieron de nuevo al campo para darle la vuelta al marcador, incluso poner tierra de por medio con 2 grandes touchdowns.

De la grada enmudecida por el juego y realización de Davante Adams, al jolgorio y apoyar al equipo, como si no hubiese pasado nada antes. Todo lo que se pide a una afición, que siempre está con el equipo a pesar de los resultados.

El equipo ganó en confianza, Josh empezó a sentirse bien con el balón, la línea ofensiva hacía su labor, en el lado contrario de la plantilla, la defensiva ponía de su parte con un gran referente al mando, Milano. Un jugador que destaca entre todos sus compañeros, por tener una actitud especial. Da el 200% en los partidos, y frente a Las Vegas, no fue menos, con una de las intercepaciones a Garappollo, que se sentía sólo en el campo, después de un comienzo prometedor.

Destacar también la aportación de Terrel Bernard, con otra interceptación y con un partido serio, junto a Milano. Esta parece de Linebackers darán que hablar en los próximos años, erigiéndose como 2 de los mejores jugadores en su puesto.

El último cuarto fue azul, un Josh Allen inconmensurable, hizo un drive a fuego lento, haciendo valer su gran precisión en pases cortos de primer nivel. Además de las carreras de Cook, que una vez más se posiciona como RB, y nos hace olvidar la última temporada de Singletary. Gran acierto de Beane en ese sentido.

En general se vio un equipo serio, que se ha quitado la etiqueta de favorito en cada partido, y que tiene que seguir jugando a lo que sabe.

Mi abuela decía que la comida sabe mejor a fuego lento, esperemos que los drives se cocinen a fuego lento, para dar ese punto de confianza en cada partido.

Buffalo susurrará este sábado desde sus casas, para que el equipo sienta ese aliento en el campo de los Commanders